Agustín Laje y la victoria cultural de Milei en Argentina.
Agustín Laje ha salido al paso de críticas que provienen de un sector minoritario de la derecha que sostiene que el presidente Javier Milei no está dando la batalla cultural en Argentina. En respuesta, Laje presentó un análisis detallado de los avances logrados desde diciembre de 2023, enfatizando que el gobierno ha implementado cambios significativos en áreas clave como la defensa de la vida y la familia. Según Laje, se han cerrado ministerios, se han prohibido prácticas como la hormonización de menores y se ha fortalecido el Plan Primeros Mil Días, lo que representa un retroceso real del progresismo cultural en el Estado argentino.
En el ámbito internacional, Laje destacó cómo Argentina ha recuperado una voz firme al defender la vida desde la concepción en foros como la ONU y la OEA. El país ha rechazado conceptos como “derechos sexuales y reproductivos” y se ha retirado de acuerdos que consideraban perjudiciales, como la Agenda 2030. Estos movimientos han permitido a Milei romper con el consenso progresista global, una hazaña que, según Laje, pocos presidentes han logrado en las últimas décadas.
Laje también resaltó el desmantelamiento de estructuras ideológicas dentro del Estado, como el cierre del INADI y la clausura de Télam, así como auditorías a organismos como el CONICET. Este cambio cultural se ha visto reflejado en el renombramiento del ex CCK como “Palacio Libertad” y en la eliminación de financiamiento estatal para colectivos artísticos militantes. Estas acciones, según Laje, marcan el fin de la maquinaria cultural kirchnerista y permiten un espacio más plural en la cultura argentina.
Finalmente, Laje concluyó su análisis con la afirmación de que la derecha ha dejado de ser un tabú, especialmente entre los jóvenes que han comenzado a votar sin complejos por ideas conservadoras. Su mensaje es claro: quienes aún duden de la batalla cultural no están observando los hechos. Con decisiones concretas y un rumbo definido, Laje sostiene que Argentina está ganando esta batalla cultural, un proceso que apenas comienza a desplegarse y que promete cambios significativos en la sociedad.
