Confianza en el Gobierno de Javier Milei Aumenta en Julio.

La confianza en el gobierno de Javier Milei mostró un repunte en julio, aumentando un 4,9% para alcanzar los 2,45 puntos, según el Índice de Confianza en el Gobierno (ICG) de la Universidad Torcuato Di Tella. Este incremento se produce después de una caída del 4,6% en junio, que había dejado el índice en 2,34 puntos. En términos interanuales, el ICG subió un 3,3%, aunque la evaluación general de la administración actual descendió un 2,4%.

El informe de la Escuela de Gobierno de la Universidad Di Tella destaca que, a pesar de las fluctuaciones, el índice de confianza se ha mantenido en un rango estrecho entre 2,33 y 2,45 en los últimos meses. Comparado con gobiernos anteriores, el nivel de confianza actual supera en un 9,6% al de Mauricio Macri en 2017 y en un 44,3% al de Alberto Fernández en 2021, aunque sigue siendo uno de los más bajos de la gestión de Milei.

Los cinco componentes que el índice revisa mostraron mejoras en cuatro de ellos. La capacidad del gobierno para resolver problemas subió un 3,6%, la honestidad de los funcionarios un 5,2%, y la eficiencia en el gasto público un 3%. La mayor subida fue en la preocupación por el interés general, con un aumento del 17,5%. Sin embargo, la evaluación general del gobierno cayó un 2,4%.

El análisis por género reveló que la confianza fue mayor entre los hombres, con un aumento del 3,1%, mientras que entre las mujeres, aunque el aumento fue del 6,1%, el nivel de confianza fue menor. Por edad, los jóvenes de 18 a 29 años mostraron el mayor nivel de confianza, seguidos por los mayores de 50 años y, finalmente, por aquellos de 30 a 49 años.

Geográficamente, el mayor nivel de confianza se observó en el interior del país, con un aumento del 3,6%. A diferencia del mes anterior, los residentes de CABA mostraron un notable incremento del 16,7%, mientras que los del GBA aumentaron un 3,8%. También se observó que la confianza fue mayor entre quienes alcanzaron la educación terciaria y universitaria.

Finalmente, el ICG reflejó variaciones significativas en función de la experiencia con delitos y las expectativas económicas. Aquellos que habían sido víctimas de delitos mostraron un aumento del 19,9% en la confianza, mientras que quienes no lo fueron aumentaron un 1,6%. En cuanto a las expectativas, quienes creen que la situación económica mejorará dentro de un año tienen un índice de 4,17 puntos, reflejando un aumento del 2,2%.